DENUNCIAN VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES Y TORTURA EN ÁMBITO DE SALUD REPRODUCTIVA ANTE LA COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS

Pieza Pequeña WebAmnistía Internacional presentó una audiencia temática sobre “Derechos Sexuales y Reproductivos de las mujeres en América del Sur”, en el marco del 158° Periodo de Sesiones Extraordinario de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, celebrado en Santiago de Chile.

“La jurisprudencia del Sistema Interamericano de protección a los Derechos Humanos sobre la violencia de género es diversa y progresista. Sin embargo, todavía no tiene precedente ni guías claras para los Estados que establezcan que la falta de acceso de mujeres y niñas a servicios de salud sexual y reproductivos, y ciertas restricciones impuestas a sus derechos sexuales y reproductivos, son formas de violencia del Estado contra las mujeres, en algunos casos constitutivas de tortura”, señaló Fernanda Doz Costa, Investigadora en Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Amnistía Internacional para América.

Amnistía Internacional ha documentado casos en múltiples países de América del Sur – tales como Paraguay, Argentina, Chile, Perú – en los que las mujeres han sido víctimas de legislaciones restrictivas sobre el aborto, imposición de maternidades forzadas a mujeres y niñas víctimas de violencia sexual, brechas en la confidencialidad, esterilizaciones forzadas.

“En este contexto, se ve un patrón común que dice relación con que no se confía en las mujeres y niñas de que pueden tomar sus propias decisiones en lo referente a su sexualidad, imponiéndoles concepciones morales y religiosas que perpetúan estereotipos de género. El acceso a servicios de salud sexual y reproductiva se convierte en una lotería, que depende de la posición o voluntad del profesional de la salud que la atiende y/o de su capacidad adquisitiva”, señala Fernanda Doz Costa.

El Estado, con frecuencia, no sólo tolera esta situación, sino que la promueve a través de legislaciones discriminatorias como la prohibición total del aborto en Chile, con lo cual se convierte en un reproductor de la violencia en contra de las mujeres y niñas.

Por ello, “es esencial que el Sistema Interamericano genere guías que den una orientación clara para los Estados Parte en torno a cómo prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres y la tortura u otros malos tratos en los ámbitos de salud sexual y reproductiva, y esperamos haber transmitido esa urgencia tras esta audiencia”, concluye Doz Costa.