SUDÁN: EL GOBIERNO DEBE INVESTIGAR EL BRUTAL HOMICIDIO DE UN UNIVERSITARIO DE 18 AÑOS A MANOS DE AGENTES DE INTELIGENCIA

Two military chaplains and a soldier point out in the sky an Antonov airplane passing over their heads on their way to Umm Dorein County. The Government of Khartoum has been using this plane to bomb the region for the last four years killing and maiming many civilians people. South Kordofan, Sudan. 25/01/15 Contextual information from Alex Neve from AI Canada, who visited the area in May 2015: https://www.amnesty.org/en/articles/blogs/2015/05/where-bombs-rain-terror-from-the-sky-while-the-world-looks-the-other-way/ "For four years civilians have been under attack in South Kordofan. The Sudanese military, determined at any cost to defeat the SPLA-North opposition that is fighting for greater autonomy for the state, has sealed opposition controlled areas off from the outside world. It has waged an unrelenting campaign of indiscriminate aerial and ground attacks clearly intended to terrorize the civilian population. Antonov, MIG and Sukhoi aircraft rain bombs and missiles down from the air. Long range shelling sends artillery rockets streaking into distant communities. Food crops have been destroyed with farmers too fearful to plant and harvest. Sudan’s humanitarian blockade means food relief doesn’t get in; nor do badly needed medicines, or supplies and funding to support schools. We have seen unexploded rockets, cluster munitions, bomb craters, and shrapnel fragments and destroyed or damaged property on the grounds of or immediately beside hospitals and medical clinics, primary and secondary schools, family compounds, IDP sites, football fields, sorghum mills, food stores, NGO premises, and a prisoner of war camp; all of which are protected under international law (since directing an attack against a zone established to shelter the wounded, the sick and civilians from the effects of hostilities is prohibited). "

Abubakar Hassan Mohamed Taha, estudiante de primer curso de ingeniería en la Universidad de Kordofán en Al Obeid, la capital del estado de Kordofán del Norte, murió por un disparo en la cabeza. Otros 27 estudiantes resultaron heridos, cinco de ellos de gravedad.

“Este violento ataque es otro aterrador episodio más de una serie de violaciones de derechos humanos contra estudiantes universitarios en todo Sudán, y subraya la determinación del gobierno de erradicar los últimos vestigios de disidencia”, ha manifestado Muthoni Wanyeki, directora regional de Amnistía Internacional para África Oriental, el Cuerno de África y los Grandes Lagos.

“La censurable violencia de los agentes del Estado contra los estudiantes debe ser objeto de una investigación exhaustiva e imparcial, y los responsables deben comparecer ante la justicia.”

Los estudiantes marchaban pacíficamente hacia la sede del sindicato de estudiantes para presentar su lista de candidatos partidarios de la oposición para las elecciones sindicales previstas para ese día.

Poco después del inicio de la marcha, unos agentes del Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional los interceptaron, en un intento de impedirles participar en las elecciones.

Un estudiante dijo a Amnistía Internacional que había visto 15 camionetas llegar a la universidad cargadas de agentes del Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional armados con rifles AK47 y con pistolas, y que empezaron a disparar contra la multitud.

El mes pasado, durante una manifestación pacífica en protesta por la mala prestación de servicios, unos agentes de seguridad golpearon y dispararon gas lacrimógeno a estudiantes de esa misma universidad; hirieron a 15, y detuvieron a otros siete.