El bombardeo aéreo de la coalición dirigida por Arabia Saudí contra un hospital apoyado por Médicos Sin Fronteras (MSF) en Yemen constituye un ataque atroz que puede equipararse a un crimen de guerra; así lo ha afirmado hoy Amnistía Internacional. El hospital rural Abs, que fue alcanzado por las bombas hacia las tres y media de la tarde, hora local, ha atendido a 4.611 pacientes desde que MSF empezó a apoyar su labor en julio de 2015.
“El bombardeo de este hospital es un acto deplorable que ha costado vidas civiles, entre ellas las de personal médico, que se dedicaban a ayudar a personas enfermas y heridas en condiciones realmente difíciles. Atacar deliberadamente instalaciones médicas constituye una infracción grave del derecho internacional humanitario, equiparable a un crimen de guerra. Las circunstancias de este ataque deben ser objeto de una investigación exhaustiva e independiente”, ha afirmado Magdalena Mughrabi, directora del Programa de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África.
“El ataque aéreo perpetrado hoy parece ser el último de una sucesión de ataques ilegales dirigidos específicamente contra hospitales, lo que evidencia un alarmante patrón de desprecio por la vida de los civiles.”