
En peligro de desplazamiento forzado 1.150 personas
Jamila y Muhammad y sus seis hijos son una de más de 180 familias palestinas que viven en Masafer Yatta-Cisjordania, parte de los Territorios Palestinos Ocupados que están en peligro de sufrir desplazamiento forzado. Aproximadamente 1.150 personas palestinas, la mitad de ellas niños y niñas, viven actualmente en nueve pueblos cuya demolición total está prevista.
Tras 23 años de procedimientos legales, el Tribunal Supremo israelí resolvió el 4 de mayo de 2022 que se podía proceder al desalojo de los habitantes de Masafer Yatta. La actividad militar en la zona ha aumentado desde el fallo del tribunal, lo que hace temer que las demoliciones sean inminentes. La expulsión a gran escala por parte de Israel, constituiría un acto de traslado forzoso, que es un crimen de guerra y de lesa humanidad.
Masafer Yatta está integrado por 19 pueblos y aldeas, de los que 9 corren riesgo inminente de demolición. Las autoridades israelíes han ordenado demoler casi todas la viviendas, así como los refugios para animales, las escuelas de educación primaria y secundaria y las infraestructuras comunitarias alegando que se construyeron sin los permisos oficiales en un lugar designado zona militar. Dichos permisos son casi imposibles de obtener para la población palestina en el contexto de un régimen de tierras y viviendas sistemáticamente discriminatorio.
En septiembre de 2022, el ejército realizó maniobras con tanques cerca de la escuela de los hijos de Jamila, quien contó a Amnistía Internacional que sus hijos más pequeños, de dos, tres y cuatro años, están aterrados desde las demoliciones. Muhammad, propietario y cuidador de 200 ovejas, ha acondicionado y amueblado una cueva que anteriormente se usaba para almacenar material de pastoreo. Su hija de 14 años, Fatima, que estudia en la escuela de secundaria de al-Fakhit, mostró la cueva a un equipo de investigación de Amnistía Internacional y comentó: “No quiero vivir aquí.”
Israel designa arbitrariamente grandes áreas de tierras palestinas como zonas militares, tierras estatales, yacimientos arqueológicos o parques nacionales para aumentar al máximo su control sobre las tierras palestinas. Estas y otras políticas que violan el derecho internacional son elementos fundamentales del régimen institucionalizado israelí de opresión y dominación sistemáticas de la población palestina.
Firma la petición y exige detener inmediatamente todos los planes de demolición de viviendas palestinas y desalojo de residentes de Masafer Yatta.
