Ante la decisión de la fiscalía saudí de pedir mayor pena de prisión para la defensora de los derechos humanos Loujain al Hathloul en la vista de apelación celebrada hoy, Lynn Maalouf, directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África, ha declarado:
“Loujain al Hathloul lleva apenas tres semanas fuera de prisión y la fiscalía ya intenta enviarla de vuelta. En lugar de recurrir a estas tácticas de intimidación debería retirar de inmediato los cargos contra ella, claramente destinados a castigarla por su activismo pacífico y sus llamamientos a la reforma social.
Loujain al Hathloul ya ha pasado más de 1.000 días privada de libertad de manera injusta y arbitraria, en régimen de aislamiento y padeciendo tortura y acoso sexual. Dado que no debería haber pasado un solo minuto entre rejas, la perspectiva de que se le imponga una pena mayor y tenga que volver a prisión es inadmisible.”