El Premio Nobel de la Paz concedido a Maria Ressa y Dmitry Muratov es una victoria para la libertad de prensa en todo el mundo

En respuesta a la concesión del Premio Nobel de la Paz 2021 a los periodistas Maria Ressa y Dmitry Muratov en reconocimiento a su lucha por la libertad de expresión en Filipinas y Rusia, respectivamente, la secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, ha manifestado:

“La concesión del Premio Nobel de la Paz a Maria Ressa y Dmitry Muratov es una victoria no sólo para el periodismo crítico independiente en Filipinas y Rusia, sino para lucha por la justicia, la rendición de cuentas y la libertad de expresión en todo el mundo.

“Durante más de tres décadas, Maria Ressa ha trabajado incansablemente como periodista en Filipinas llevando a cabo una fundamental labor de investigación sobre la corrupción, los abusos de poder y las violaciones de los derechos humanos en la llamada “guerra contra las drogas” del presidente Rodrigo Duterte. Como cofundadora de Rappler, riguroso y aclamado sitio de noticias de Internet, ha abierto los ojos al mundo sobre la brutalidad y la impunidad generalizada en Filipinas. En pocas palabras, es un icono global de la libertad de prensa.

“Dmitry Muratov es un referente de la prensa libre en Rusia, con su periódico en el que se lleva a cabo un periodismo contundente y valiente que se enfrenta al riesgo mortal de un entorno cada vez más peligroso para la prensa en el país. Muratov es una de las pocas personas que sigue exigiendo al poder que rinda cuentas. Aplaudimos la infatigable profesionalidad y el valor no sólo de Muratov, sino de todos los y las periodistas que sufren durante el ejercicio de su labor profesional en Rusia.

“Las autoridades rusas y filipinas deben tomar nota de la concesión del Premio Nobel de la Paz a Dmitry Muratov y Maria Ressa, y acabar con su implacable ataque contra la libertad de prensa”.

Información complementaria

Maria Ressa fue una de las fundadoras, en enero de 2012, de Rappler, sitio de noticias en Internet crítico con el presidente Rodrigo Duterte y la letal “guerra contra las drogas” de su administración. Ressa es también presidenta de la empresa.

Durante el mandato de Duterte, Maria Ressa, el experiodista Reynaldo Santos y la dirección de Rappler han hecho frente a amenazas y numerosos pleitos e investigaciones por presuntos delitos fiscales y violaciones de la prohibición del control extranjero de los medios de comunicación, entre otros.

En junio de 2020, Maria Ressa fue declarada culpable de “ciberdifamación” en aplicación de la controvertida Ley contra la Ciberdelincuencia de Filipinas. Por esta sentencia condenatoria, y si es declarada culpable de multitud de cargos más, se enfrenta a hasta 60 años de cárcel. Amnistía Internacional fue uno de los muchos grupos de derechos humanos en todo el mundo que condenaron esta sentencia como ataque a la libertad de prensa.

Dmitry Muratov fue uno de los fundadores de Novaya Gazeta en 1993 y ha sido su director desde entonces. Según el Comité para la Protección de los Periodistas, al menos seis de los periodistas de esta publicación, incluida Anna Politkovskaya, han sido asesinados en el curso de su labor profesional.

Dmitry Muratov y sus colegas de Novaya Gazeta llevan décadas proporcionando a la sociedad rusa información esencial de interés público, enfrentándose constantemente a ataques, amenazas y cárcel.

En los últimos meses, cada vez son más las organizaciones de medios de comunicación y periodistas que son declarados “indeseables” o “agentes extranjeros” y obligados a dejar de trabajar o a hacerlo bajo duras restricciones administrativas y económicas.