Estados Unidos: El deficiente informe sobre “derechos inalienables” del Departamento de Estado menoscaba el derecho internacional

El sumamente deficiente informe de la denominada “Comisión de Derechos Inalienables” del Departamento estadounidense constituye una colosal falta de liderazgo de Estados Unidos que podría menoscabar la protección de los derechos humanos en todo el mundo, ha manifestado Amnistía Internacional hoy.

“En medio de una pandemia mundial que ha matado a más de 100.000 personas en Estados Unidos, la administración Trump ha tomado la deplorable decisión de no cumplir con su obligación de hacer valer el derecho a la salud y a no sufrir discriminación, entre otros derechos humanos”, ha afirmado Erika Guevara-Rosas, directora de Amnistía Internacional para las Américas. “El gobierno de Estados Unidos no está autorizado legalmente a redefinir las obligaciones que ha contraído en virtud de los tratados internacionales de derechos humanos, que casi todos los países del mundo han acordado cumplir.”

En su información para la Comisión de Derechos Inalienables del Departamento de Estado de Estados Unidos, Amnistía Internacional ha pedido al gobierno estadounidense que renueve su compromiso con los derechos humanos reconocidos internacionalmente, no sólo poniendo fin a las atroces violaciones de derechos humanos que él mismo comete, sino también reanudando su interacción con la comunidad internacional por medio de las Naciones Unidas y las instituciones regionales de derechos humanos.

En lugar de ello, el gobierno de Estados Unidos ha abandonado recientemente su puesto en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, se ha negado a responder a las cartas enviadas por los expertos de derechos humanos de la ONU para expresar su preocupación y está intentando ahora negar los derechos sexuales y reproductivos, los derechos LGBTI y los derechos socioeconómicos, entre otros –que califica de “controversias sociales y políticas divisivas”–, redefiniendo unilateralmente el concepto de “derechos humanos” y rechazando la autoridad interpretativa de la ONU y otros órganos internacionales de derechos humanos.

“El intento del Departamento de Estado de definir a su gusto los derechos humanos –a fin de negar ilegítimamente los derechos de las mujeres, las personas LGBTI y otros colectivos– es una peligrosa maniobra política que podría precipitar en todo el mundo una carrera hacia el abismo entre los gobiernos que violan los derechos humanos”, ha advertido Erika Guevara-Rosas. “Este informe, elaborado mediante un proceso ilegítimo, no hace más que poner aún más de manifiesto el desprecio de esta administración por los derechos humanos y su deseo de eliminar determinados derechos con fines políticos.”

Con miras al examen a que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU someterá a Estados Unidos en noviembre de 2020, Amnistía Internacional ha presentado una lista motivos de preocupación y recomendaciones para que Estados Unidos mejore con urgencia su historial en materia de derechos humanos.