República Centroafricana: Cinco años después, hacen falta más medidas para que el Tribunal Penal Especial esté plenamente operativo

En la conmemoración del quinto aniversario del establecimiento del Tribunal Penal Especial en la República Centroafricana (RCA), Tity Agbahey, responsable de campañas de Amnistía Internacional sobre África Central, ha declarado hoy:

“En un país donde la población civil ha pagado un precio muy alto debido a las atrocidades de los grupos armados y todas las partes del conflicto, el establecimiento de este tribunal fue una medida positiva importante.

“Considerado un símbolo de esperanza para muchas víctimas, el establecimiento de este tribunal fue una respuesta a una petición unánime de justica y rendición de cuentas. Pero deben tomarse más medidas para que el Tribunal esté plenamente operativo y garantizar que las víctimas de los crímenes horrendos perpetrados vean pronto los primeros juicios.

“Esto incluye que los socios internacionales aumenten y mantengan el apoyo económico, y una mejor coordinación con los tribunales penales nacionales y la Corte Penal Internacional.

“La reciente serie de detenciones de personas trasladadas al Tribunal es un paso positivo para la lucha contra la impunidad en el país. Estas personas deben comparecer sin demora ante este organismo, ser informadas de las razones de su detención y disponer de asistencia letrada”.

Información general

El Tribunal Penal Especial fue creado en virtud de una ley el 3 de junio de 2015. Es un tribunal híbrido con jurisdicción sobre violaciones graves de derechos humanos y del derecho internacional humanitario cometidas desde 2003.

Su periodo de sesiones inaugural se celebró en octubre de 2018. Según la información pública disponible más reciente, en la actualidad hay ocho casos en los que la investigación está cerrada, otros ocho que se encuentran en investigación y alrededor de 15 que son objeto de examen preliminar.

Tras los homicidios perpetrados en la localidad de Ndele (noreste) en abril de este año, el Tribunal anunció el 8 de mayo que investigará el caso. Fueron detenidas nueve personas en relación con los hechos. Otras nueve, miembros del grupo armado UPC, fueron detenidas el 19 de mayo en relación con unos enfrentamientos habidos en Bambouti, Obo y Zemio (sureste).

La República Centroafricana tiene un largo historial de golpes de Estado, conflictos armados y violencia contra la población civil. El conflicto actual se inició en marzo de 2013, cuando una coalición de mayoría musulmana conocida como Seleka derrocó con violencia al gobierno.

A mediados de 2013, había surgido una milicia animista y cristiana conocida como antibalaka para oponerse a Seleka, que comenzó a llevar a cabo ataques en gran escala contra comunidades musulmanas en la región occidental del país. Ambas partes han cometido crímenes de derecho internacional. La situación también es objeto de investigación de la Corte Penal Internacional desde septiembre de 2014.

El 6 de febrero de 2019, el gobierno de la RCA y 14 grupos armados firmaron un acuerdo de paz; sin embargo, continúan cometiéndose abusos graves contra la población civil, incluidos homicidios ilegítimos y violencia sexual. Alrededor del 80% del territorio sigue estando bajo control de grupos armados.