SMOKESCREEN: Mirada entre bastidores de nuestra investigación visual sobre el uso letal de granadas de gas lacrimógeno en Irak

En octubre de 2019 estallaron manifestaciones multitudinarias en Bagdad y en todo el sur de Irak. Se pidió al Evidence Lab del Programa de Respuesta a la Crisis de Amnistía que utilizara técnicas de código abierto para ayudar al equipo de investigación sobre Irak de la organización a investigar la represión de las protestas. No tardaron en aparecer vídeos de muertes especialmente terribles: manifestantes a quienes se mataba con granadas de uso militar de 40 mm que quedaban incrustadas en su cráneo.

Tras identificar la fabricación y procedencia de las granadas de humo y de gas lacrimógeno, Amnistía elaboró un informe con sus conclusiones y emprendió un extenso trabajo de campaña sobre la cuestión, utilizando avanzadas metodologías para mostrar cómo las fuerzas de seguridad de Irak empleaban deliberadamente tales granadas para matar y mutilar.

En el marco de esta investigación, Amnistía contactó con SITU Research para que colaborara en la creación de una plataforma en la demostrar hasta qué punto estos ataques eran deliberados. El resultado de ello es SMOKESCREEN (CORTINA DE HUMO), entorno inmersivo tridimensional que sintetiza descripciones e imágenes testimoniales geolocalizadas para crear una experiencia de usuario intuitiva. Este artículo de SITU Research es una mirada entre bastidores del modo en que se creó la plataforma y una explicación de la metodología utilizada.

DESAFÍOS

El objetivo de los tres meses de colaboración era contextualizar y analizar un archivo de vídeos de las redes sociales que mostraban el uso de las granadas de gas lacrimógeno. Había dos desafíos principales. En primer lugar, cómo comunicar la letalidad de estas granadas sin incluir vídeos y fotografías espeluznantes.  En segundo lugar, cómo trasmitir las características de funcionamiento de las municiones en relación con los espacios públicos y el entorno urbano en que estaban teniendo lugar las protestas.  La solución fue una mezcla por partes iguales de curación de contenidos, diseño de experiencia de usuario, reconstrucción de sucesos y análisis técnico.

RECONSTRUCCIÓN DEL ENTORNO URBANO

Utilizando imágenes de satélite a resolución de 30 cm y fotografías de referencia de la zona de fuentes comerciales, creamos un modelo digital del entorno urbano en un radio de 3,5 kilómetros de la plaza de Tahrir. Utilizamos este modelo y puntos referencia conocidos para calcular las localizaciones y conos de vista de los videoperiodistas en el programa informático de código abierto Blender. La funcionalidad de rastreo de movimiento de este programa nos permitió también computar el movimiento de la cámara y captar así los micromovimientos del videoperiodista.

El resultado es una integración visual y espacial fluida del material fuente primario sin nuestro contenido diagramático y representacional.  El modelo y el movimiento tridimensional de la cámara amplían el campo de visión más allá de lo captado en los vídeos primarios, lo que añade una capa de más de información espacial a la plataforma. Es el conocimiento espacial continuo y multimodal lo que permite al usuario extraer conclusiones esenciales sobre la relación entre el entorno urbano y el empleo indebido del arma. Por ejemplo, sabemos que estos proyectiles son especialmente letales cuando se disparan directamente contra manifestantes. Combinando el modelo digital con los vídeos podemos revelar el bajo ángulo de tiro de las fuerzas de seguridad iraquíes en relación con la localización de las multitudes congregadas en el puente de Jimhouriya del centro de Bagdad.

DISEÑO DE EXPERIENCIA DE USUARIO

Al diseñar la experiencia de usuario, vimos que teníamos que entretejer el vídeo de código abierto con texto aclaratorio, sin perder el contexto espacial ni la continuidad narrativa. Colocando la imagen en un modelo tridimensional de su entorno urbano original –la zona de alrededor de la plaza de Tahrir y el puente de Jimhouriya– pudimos aportar valor añadido: el entorno creado se convirtió en el adhesivo necesario para relacionar diversos vídeos tomados en distintos momentos por distintas personas. A continuación, redujimos el archivo de vídeos (de más de 15 vídeos a 10 videoclips de menos de 10 clips de menos de cinco segundos cada uno), aislando así momentos clave de las manifestaciones. En algunos de los clips se ven claramente las granadas de 40 mm en vuelo. Otros dan contexto a la ubicación de los manifestantes y las fuerzas de seguridad y ponen de manifiesto el volumen de granadas lanzadas. Este análisis de vídeos sólo fue posible gracias a la amplia documentación en vídeo realizada por activistas en Bagdad.

NAVEGACIÓN EN LA PLATAFORMA

La plataforma facilita una navegación por barra de desplazamiento que permite a los visitantes avanzar y retroceder por el contenido textual, visual y espacial a su propio ritmo y con movimiento constante.

SMOKESCREEN maximiza el control de usuario para permitir que el espectador manipule el contenido de vídeo de la plataforma al desplazarse por él. Las pistas de reproducción están vinculadas a la navegación por la página, de manera que el desplazamiento del usuario en la barra se transmite con fluidez a la búsqueda de vídeo. Es un mecanismo semejante al acto de poner la mano en el plato de un reproductor de discos de vinilo, que detiene la reproducción y puede mover el disco en ambas direcciones, lo que, en este caso, permite al espectador examinar el contenido de vídeo imagen a imagen.  SITU Research trabajó con la consultora Studio Scasascia para perfeccionar esta técnica.

REPRODUCCIÓN DE VÍDEO

A fin de conseguir una búsqueda fluida de vídeo por desplazamiento en la barra, tuvimos que adoptar un sistema de reproducción de vídeo poco ortodoxo. Debido a las optimizaciones del vídeo HTML5 del navegador, la búsqueda de vídeo está basada en el tiempo, no en la imagen, como suele ocurrir con los programas estándar de edición de vídeo.

En este caso, cambiar rápidamente la posición de reproducción hace en general que el reproductor se salte imágenes de vídeo, con lo que es probable que el espectador pierda contenido. Puesto que todas y cada una de las imágenes de los vídeos incorporados a la plataforma muestran datos visuales decisivos, era esencial que no se perdiera nada de este contenido. Para solucionarlo, presentamos cada clip en forma de secuencia de imágenes separadas: flipbook digital. Este enfoque garantiza un experiencia visual fluida y a un ritmo de imagen constante, y revela el análisis granular imagen a imagen que permite la verificación digital y la reconstrucción de sucesos.

DEMOSTRACIÓN DEL IMPACTO LETAL

Un elemento importante de SMOKESCREEN es la demostración del impacto letal de las granadas de 40 mm en el cuerpo humano. Para representar este impacto sin mostrar imágenes explicitas de lesiones reales, utilizamos una herramienta analítica del campo de la ingeniería. Este análisis nos permitió también entender y corroborar información de primera mano que mostraba hasta qué punto estas armas en teoría “menos letales” pueden ser mortíferas. Creamos un modelo numérico utilizando una herramienta de análisis de elementos finitos que simula los efectos de las fuerzas físicas sobre objetos interactuantes.  Nuestra metodología consistió en simular el impacto de los proyectiles contra una simulación del cuerpo humano. El medio que utilizamos fue  gel balístico, material utilizado a menudo para cuantificar y medir el impacto balístico. Aunque el cuerpo humano es mucho más complejo, se utiliza gel balístico porque sus propiedades elásticas y maleables con comparables en gran medida a los tejidos y músculos humanos. Creamos dos modelos digitales: uno a partir de las especificaciones del fabricante de las granadas de gas lacrimógeno de 40 mm M713 cuyo uso se había descubierto en Bagdad, y otro a partir de una escopeta de caza estándar de calibre 12 que está concebida expresamente para matar

Hay muchas investigaciones que documentan el funcionamiento de las armas menos letales cuando se disparan de manera consecuente con la intención declarada de lanzar gas lacrimógeno (es decir, a ángulo alto), sin embargo, los análisis de las mismas armas utilizadas de manera indebida con sorprendentemente escasos. Lo único que hay que hacer para convertir estas granadas de 40 mm en munición mortífera es reducir el ángulo de tiro. Este hecho es esencial para comprender que la clasificación nominal de “menos letal” no puede servir de pretexto para el uso letal y excesivo de la fuerza.

SMOKESCREEN muestra lo importante que es agrupar actualmente en la esfera de los derechos humanos distintos elementos de análisis de diversos campos. Al hacerlo, Amnistía Internacional y SITU Research, junto con otras entidades asociadas, han podido mostrar cómo las fuerzas de seguridad iraquíes atacaron deliberadamente a manifestantes disparando las granadas más o menos a la altura de la cabeza, con consecuencias devastadoras.

Este artículo de invitado ha sido escrito por Jeevan Farias, investigador de SITU Research