COLOMBIA: GRUPO PARAMILITAR OBLIGA A CIENTOS DE PERSONAS A HUIR DE SUS HOGARES EN UN CONFLICTO QUE CONTINÚA

El desplazamiento forzado de 300 personas de una comunidad del noroeste de Colombia por un grupo paramilitar es una prueba trágica de que el conflicto armado está lejos de haber llegado a su fin, dijo Amnistía Internacional.

Durante el fin de semana, alrededor de 200 hombres armados identificados como miembros del grupo paramilitar Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) entró en la localidad de Peña Azul (Alto Baudó, Chocó), en el noroeste de Colombia.

Según testigos, los paramilitares entraron en la localidad buscando a miembros del grupo guerrillero ELN (Ejército Nacional de Liberación), lo que, en la práctica, obligó a huir a 399 personas (128 familias) que temían por su vida. Aún no se conoce el paradero de ocho de esas familias.

El 22 de febrero, el ministro de Defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, dijo en una entrevista radiofónica en respuesta a la publicación del Informe Anual de Amnistía Internacional 2016/7, que no había grupos paramilitares activos en Colombia.

“Las autoridades colombianas defienden categóricamente que todos los paramilitares han sido desmovilizados, pero la realidad es otra. En lugar de negar que los paramilitares continúan activos, las autoridades deben actuar para proteger a esas comunidades de los grupos que las aterrorizan”, dijo Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.

“Los trágicos acontecimientos del fin de semana muestran que la firma de los acuerdos de paz es sólo un paso en el largo camino hacia un país en el que la gente pueda vivir sin temor a ser víctima de homicidio, desaparición o desplazamiento forzado por pánico a perder la vida.”

“En amplias zonas de Colombia, el conflicto armado dista mucho de haber finalizado. A menos que las autoridades brinden protección urgente a estas comunidades, podrían perderse muchas vidas.”

Información complementaria

En 2014, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, formadas por ex miembros de los grupos paramilitares desmovilizados hace una década, iniciaron una operación para controlar el Alto Baudó, territorio poblado por comunidades afrodescedientes e indígenas próximo al Pacífico, y otros municipios importantes de la región.

Desde que comenzó el proceso de paz con las FARC, y especialmente desde septiembre de 2015, ha habido noticias cada vez más abundantes de actividad paramilitar en la región del Alto Baudó. También se ha informado de un aumento de la actividad paramilitar en otras partes del país en las que diversos grupos armados tratan de hacerse con el control de algunos de los territorios antes controlados por las FARC y por el ELN, que actualmente está negociando un acuerdo de paz con el gobierno colombiano.