En respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo de Corea del Sur que anula las declaraciones de culpabilidad de dos soldados encarcelados en 2017 por mantener relaciones sexuales consentidas entre personas del mismo sexo mientras estaban fuera de servicio, Boram Jang, investigadora de Amnistía Internacional para Asia Oriental, ha manifestado:
“Esta decisión pionera es un importante triunfo en la lucha contra la discriminación a la que se enfrentan las personas LGBTI en Corea del Sur”.
“La criminalización de las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo en el ejército de Corea del Sur ha sido durante mucho tiempo una escandalosa violación de derechos humanos, pero la sentencia de hoy abre el camino a que el personal militar viva libremente su vida sin temor al procesamiento.”
“El gobierno surcoreano debe ahora derogar rápidamente el artículo 92-6 del código militar como siguiente paso para poner fin a la estigmatización generalizada que sufren las personas LGBTI en el país.”
Información complementaria
En una trascendental decisión tomada por el pleno de la sala, el Tribunal Supremo de Corea del Sur ha anulado hoy las declaraciones de culpabilidad dictadas por un tribunal de instancia inferior contra dos soldados en virtud del artículo 92-6 de la Ley Penal Militar, que castiga con hasta dos años de prisión las relaciones sexuales consentidas entre hombres en el ejército, basándose en una cláusula de “actos indecentes”.
Los dos soldados habían sido condenados respectivamente a tres meses y cuatro meses (más un año de libertad condicional) de prisión en 2017, cuando las autoridades militares llevaron a cabo una investigación para identificar y castigar a los soldados sospechosos de mantener relaciones sexuales con hombres. A consecuencia de esa investigación, más de 20 soldados fueron acusados en virtud del artículo 92-6 de la Ley Penal Militar por mantener presuntamente relaciones sexuales consentidas con personas del mismo sexo.
El Tribunal concluyó que, si las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo tenían lugar fuera de la base militar, mientras los soldados estaban fuera de servicio y con consentimiento mutuo, la Ley no se aplica. Además concluyó que la criminalización de estos actos violaría de manera injustificada el derecho de los soldados a la autonomía sexual, y les negaría su derecho a la igual, a la dignidad y a no sufrir discriminación, así como su derecho a buscar la felicidad, garantizado en la Constitución.
La decisión de hoy anula también los precedentes del propio Tribunal Supremo que confirmaban declaraciones de culpabilidad por relaciones sexuales consentidas entre hombres sin examinar si esas relaciones habían tenido lugar estando de servicio y si se llevaban a cabo con consentimiento mutuo.
Actualmente, el Tribunal Constitucional de Corea del Sur está considerando, por cuarta vez, si la criminalización de las relaciones sexuales con consentimiento mutuo entre personas del mismo sexo por parte de personal militar es constitucional, tras haber resuelto en tres ocasiones desde 2002 que sí lo es.
El informe de Amnistía Internacional Serving in Silence: LGBTI People in South Korea’s Military reveló las destructivas consecuencias que la criminalización de las relaciones sexuales consentidas entre personas del mismo sexo en el ejército de Corea del Sur tenían en las personas LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales).