Saleh Diab y su familia corren peligro de ser trasladados ilegalmente del Jerusalén
Oriental ocupado, a raíz de que un tribunal de distrito israelí rechazara en febrero de
2025 un recurso de apelación contra el desalojo de su vivienda, en el barrio de Sheikh
Jarrah. Estos desalojos forzosos, promovidos por el grupo de colonos Nachalat
Shimon, forman parte de una constante de desposesión en Sheikh Jarrah. En mayo, el
Tribunal Supremo de Israel otorgó a la familia Diab autorización para apelar la decisión,
lo que supone su última esperanza jurídica contra el desplazamiento.
Saleh Diab, padre de cinco hijos, y sus familiares, incluidos niños, dos hermanos y sus hijos, llevan mucho
tiempo sufriendo amenazas de desalojo por parte del grupo de colonos Nahalat Shimon International.
Saleh Diab ha estado en primera línea de la lucha para proteger a las familias palestinas de Sheikh Jarrah
contra el desalojo forzoso, exponiéndose, sin protección, a la violencia extrema tanto de los colonos como
de la policía. Después de que el Tribunal de Distrito de Jerusalén rechazara el recurso de apelación de
Saleh Diab en febrero, la última esperanza jurídica que le queda a su familia es la segunda apelación, que
será vista por el Tribunal Supremo. En caso de ser desplazadas, 23 personas, incluidos cinco niños,
perderán el único lugar al que llaman hogar.
El caso de la familia Diab pone de relieve la campaña sostenida de Israel para expandir los asentamientos
ilegales israelíes y aumentar la frecuencia de los desalojos forzosos de población palestina residente,
como la de Sheikh Jarrah y Silwan, para dejar sitio a dichos asentamientos.
Firma la petición para que se detenga de inmediato el desalojo forzoso de la familia Diab en el barrio de Sheikh
Jarrah y a que ponga fin al desplazamiento forzado de la población palestina de Jerusalén Oriental.