El grupo armado autodenominado Estado Islámico ha reivindicado la autoría de los atentados con explosivos y armas de fuego cometidos ayer en Teherán contra el Parlamento y el mausoleo del ayatolá Jomeini —el primer líder de la República Islámica— en los que varias personas han muerto y decenas han resultado heridas. En respuesta, Magdalena Mughrabi, directora adjunta del Programa para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional, ha declarado:
“El atentado coordinado de ayer contra el Parlamento y el mausoleo del ayatolá Jomeini es un ataque deliberado y brutal contra la población civil perpetrado a sangre fría. Jamás un ataque contra civiles puede estar justificado. El grupo armado autodenominado Estado Islámico ha vuelto a dejar patente su absoluto desprecio por la vida humana y los principios fundamentales de humanidad.
Las autoridades iraníes deben realizar sin demora investigaciones independientes e imparciales sobre estos atentados y poner a los responsables a disposición judicial para que sean sometidos a un juicio justo, sin violar la prohibición absoluta de la tortura y otros malos tratos y sin recurrir a la pena de muerte como castigo.”