El Tribunal Oral en lo Penal de Colina de forma unánime declaró culpable al militar que disparó con un arma de guerra a Carlos Astudillo el 20 de octubre de 2019. Por esos días, Chile estaba bajo Estado de Emergencia Constitucional decretado por el ex presidente Sebastián Piñera, lo que permitió sacar a las Fuerzas Armadas a las calles para gestionar el orden público junto a Carabineros, esto pese a no tener aquel rol ni la preparación para aquello.
En el marco del estallido social, Carlos Astudillo participaba de una manifestación en la Plaza de Armas de Colina cuando recibió el impacto por la espalda. Producto del ataque con munición letal sufrió la fractura del fémur y la destrucción de la arteria femoral, lo cual lo tuvo en riesgo vital. En la actualidad sigue en proceso de recuperación.
Desde Amnistía Internacional valoramos y sostenemos que el veredicto condenatorio de este caso conlleva un avance en la protección y reconocimiento del Derecho Internacional de los Derechos Humanos; y, por cierto, constituye un paso importante en materia de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición para las víctimas.
El Tribunal de Colina calificó el delito de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves gravísimas y la sentencia se dará a conocer el 28 de diciembre de este año. Esperamos que este tipo de delito sea debidamente sancionado con penas proporcionales a la gravedad de los hechos.
Sin embargo, desde Amnistía Internacional enfatizamos además que todos los casos de violaciones de derechos humanos deben investigarse y sancionarse con premura e imparcialidad, considerando no solamente a quienes apretaron el gatillo sino también a quienes ordenaron, permitieron o no evitaron que esto sucediera. Toda la línea de mando debe ser investigada por los graves e injustificados actos que ocurrieron tras el 18 de octubre de 2019.