En respuesta a los informes que indican que la administración Trump no puede reunir a cientos de familias más de las que se había informado previamente, Denise Bell, investigadora sobre los derechos de las personas refugiadas y migrantes de Amnistía Internacional Estados Unidos, ha declarado:
“Mientras el número de niños y niñas que siguen apartados de sus familias sigue aumentando, la rendición de cuentas de las personas que los separaron resulta más urgente si cabe. Estas familias deben reunirse lo antes posible, y los padres y madres deportados que fueron separados de sus hijos e hijas deben recibir un permiso de permanencia temporal por razones humanitarias en Estados Unidos.
“Una investigación penal es un paso fundamental y necesario para garantizar que este tipo de agravios no se vuelvan a repetir. Tiene que someterse a una investigación efectiva y, cuando existan indicios suficientes, a enjuiciamiento a todos los funcionarios, personal y contratistas del gobierno que sean responsables de los abusos cometidos durante este vergonzoso periodo de nuestra historia, cualquiera que sea el cargo que ocuparan u ocupen en la actualidad. Para reparar los daños causados por la separación familiar, el gobierno de Estados Unidos debe ofrecer a las familias separadas que sufrieron graves daños a manos de sus funcionarios una vía para la adquisición de una situación legal, así como una compensación monetaria y acceso a servicios médicos, jurídicos, de salud mental y otros servicios sociales que sean necesarios.”
Más información: Catastrophic immigration policies resulted in more family separations than previously disclosed, 11 de octubre de 2018.
Esta declaración está disponible (en inglés) en: https://www.amnestyusa.org/press-releases/separated-families-must-be-reunited-as-quickly-as-possible/