(Johannesburgo, 5 de marzo de 2015) La consagrada defensora sudafricana de los derechos humanos Sicel’mpilo Shange-Buthane ha entrado a formar parte de Amnistía Internacional Sudáfrica en calidad de directora ejecutiva de la oficina nacional, ha anunciado hoy la organización.
Entre otras funciones, Sicel’mpilo se ocupará de dirigir las campañas de Amnistía Internacional en demanda de rendición de cuentas y justicia en Sudáfrica, hacer trabajo de promoción sobre la política interna y exterior del gobierno sudafricano y crear un movimiento aún más fuerte de defensa de los derechos humanos en el país.
Llega a Amnistía Internacional Sudáfrica desde el Consorcio para Refugiados y Migrantes en Sudáfrica (CoRMSA).
“Sudáfrica en un país muy importante para Amnistía Internacional debido a su legislación progresista y su constitucionalismo –ha manifestado Colm O Cuanachin, director general de la Secretaría General de la organización–. Es importante que Amnistía Internacional consolide su oficina local para garantizar la rendición de cuentas en favor de los derechos humanos en el país.”
Sicel’mpilo tiene amplia experiencia en el campo de la justicia social, los derechos humanos y la atención de problemas de desigualdad. Ha sido durante muchos años asesora jurídica general y responsable de casos de Black Sash, organización no gubernamental de justicia social sudafricana, dedicada a abordar violaciones graves de derechos humanos y garantizar el acceso a la justicia. También ha sido encargada de promoción y directora adjunta de acceso a servicios sociales y otras actividades de campaña en la misma organización.
“Es para mí un honor entrar a formar parte de Amnistía Internacional Sudáfrica en este momento de la trayectoria de nuestro país. Sudáfrica acaba de celebrar 20 años de democracia. Sin embargo, los avances realizados deben también traducirse en cambios reales para las personas corrientes, muchas de las cuales viven en la pobreza, no tienen trabajo, sufren discriminación y son víctimas de agresiones a diario. Falta de protección policial adecuada, violación de libertades fundamentales y ataques dirigidos deliberada y específicamente contra no nacionales, saqueos, xenofobia y agresiones a miembros de la comunidad LGBTI, todos estos males sociales representan una amenaza para el futuro del país”, ha señalado Sicel’mpilo Shange-Buthane, recién nombrada directora ejecutiva de Amnistía Internacional Sudáfrica.
Su nombramiento se produce tras haber establecido la organización –que tiene en la actualidad más de siete millones de simpatizantes y miembros en todo el mundo–su oficina regional para el sur de África en Johannesburgo en 2014, en el marco de su nueva estrategia global de trabajar más cerca de las bases.