El recrudecimiento de la violencia en los Territorios Palestinos Ocupados (TPO) e Israel iniciado el 1 de octubre ha causado la muerte de al menos 27 palestinos y siete israelíes en los últimos días. Los palestinos han realizado varios ataques contra israelíes en Israel y los TPO en los que han muerto seis civiles y un soldado fuera de servicio y han resultado heridas otras personas. Las fuerzas israelíes han usado fuerza excesiva y a veces letal contra manifestantes palestinos, causando lesiones a cientos de personas con munición real y balas metálicas recubiertas de goma, y no han protegido a los civiles palestinos de la oleada de ataques a manos de colonos.
Hay una delegación de investigadores de Amnistía Internacional en Cisjordania, disponible para conceder entrevistas sobre la violencia en curso.
“Vemos una constante peligrosa de ataques deliberados contra civiles y homicidios ilegítimos. Deben cesar de inmediato todos los homicidios ilegítimos y el uso arbitrario y abusivo de la fuerza. Todas estas violaciones deben investigarse efectivamente y sus autores han de rendir cuentas de sus actos. Sin justicia y rendición de cuentas, esta espiral de derramamiento de sangre continuará”, afirmó Philip Luther, director del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.
“Las fuerzas israelíes han usado la fuerza excesiva en gran escala e intensificado la restricción de la circulación, y han prometido aumentar los castigos ilegales, como los derribos de viviendas. Las medidas de seguridad deben respetar el derecho internacional. Nunca se puede justificar el castigo colectivo de la población palestina.”
Pueden leer la declaración de Amnistía Internacional sobre los sucesos ocurridos entre el 1 y el 10 de octubre en la Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Oriental, en el siguiente enlace:
Israel/OPT: No justification for deliberate attacks on civilians, unlawful killings by Israeli forces, or collective punishment of Palestinians