Ante la información de que se ha impuesto hoy una pena de seis años y medio de prisión a la abogada china de derechos humanos Li Yuhan por “provocar peleas y crear problemas”, y fraude, Sarah Brooks, directora regional adjunta de Amnistía Internacional para China, ha declarado:
“Li Yuhan es una de los numerosos abogados y abogadas de derechos humanos en China que ha pagado un precio enorme por su trabajo de defensa de personas acusadas injustamente de actuaciones indebidas. Debe quedar en libertad de inmediato y sin condiciones, y las múltiples denuncias de malos tratos infligidos en detención deben ser investigadas de forma independiente”.
“La abogada Li ya lleva seis años detenida arbitrariamente como parte de la represión implacable por las autoridades de activistas, juristas y cualquier persona que defienda de forma pacífica los derechos humanos en China. Debería estar en su casa, con su familia, y no en prisión sólo por hacer su trabajo de defensa de los derechos humanos de las personas.”“Los abogados y abogadas desempeñan un papel crucial para hacer valer el Estado de derecho y salvaguardar los derechos de las víctimas de violaciones de derechos humanos. Pero en China son objeto de ataque y corren el riesgo de convertirse a su vez en víctimas. Instamos a las autoridades chinas a que pongan fin a la represión de las personas que defienden los derechos humanos, y seguiremos reclamando justicia y una reparación para remediar las violaciones perpetradas contra ellas.”
Información complementaria
Li Yuhan, abogada de más de 70 años, ha representado a abogados y abogadas de derechos humanos, y a víctimas de abusos contra estos derechos. El 25 de octubre de 2023, un tribunal de la ciudad septentrional de Shenyang la condenó a seis años y medio de prisión por “provocar peleas y crear problemas”, y fraude a raíz de un juicio secreto celebrado dos años antes, en octubre de 2021. Se permitió asistir a la vista judicial a su hermano y a dos profesionales de la abogacía. La condena incluye el tiempo cumplido, por lo que quienes la apoyan esperan que Li Yuhan sea puesta en libertad en abril de 2024. Según informes, Li declaró ante el tribunal su intención de recurrir contra la sentencia.
Durante los años que ejerció como abogada de derechos humanos, Li Yuhan recibió de las autoridades chinas amenazas frecuentes contra ella misma y contra su familia debido a su defensa de casos delicados sobre libertad de religión y de creencias, como los de Falun Gong y las casas iglesia cristianas. También ha sido representante legal de la abogada de derechos humanos Wang Yu durante la “represión de los 709” contra abogados y abogadas, y activistas jurídicos.
Li Yuhan desapareció en octubre de 2017 y fue detenida formalmente justo un mes después. Su juicio, previsto originalmente para abril de 2019, fue aplazado una y otra vez.
En octubre de 2022, Li Yuhan dijo a su representante legal que su capacidad para andar se había visto gravemente afectada debido a lesiones importantes en las rodillas y que necesitaba usar dos muletas. También sufre problemas cardiovasculares, hipertensión y un deterioro significativo de la visión y de la audición. Además, se reveló que en el centro de detención le retenían deliberadamente la medicación, la comida y el agua templada, y que los funcionarios habían orinado en su comida. Las condiciones mejoraron únicamente después de que la representación legal de Li Yuhan presentara múltiples denuncias.