En respuesta a la decisión adoptada hoy por el Parlamento eslovaco de aprobar un proyecto de ley que amplía el poder de las autoridades para restringir e incluso prohibir las reuniones pacíficas, Rado Sloboda, director de Amnistía Internacional Eslovaquia, ha afirmado:
“Demostrando un total desprecio por los derechos humanos, el Parlamento eslovaco votó hoy a favor de imponer restricciones draconianas no sólo a nuestro derecho de reunión pacífica, sino también a nuestra libertad de expresión, nuestra libertad de asociación y nuestro acceso a la información.
“Si bien el gobierno realizó algunos pequeños cambios en el proyecto de ley ante la indignación generalizada que despertó, estas concesiones no evitan la drástica violación de los derechos humanos que supone esta ley.
“En lugar de abordar motivos de preocupación genuinos relacionados con la seguridad, este proyecto de ley incrementará el poder de las autoridades para restringir e incluso prohibir reuniones pacíficas, y tendrá un importante efecto inhibidor en materia de derechos humanos. Pedimos al presidente que vete esta desafortunada ley y se asegure de que Eslovaquia sigue protegiendo y respetando plenamente el derecho de reunión pacífica.