Ante las actuaciones penales por cargos de terrorismo iniciadas contra figuras de oposición en el exilio y miembros del Comité contra la Guerra de Rusia —destacada iniciativa que aglutina al movimiento ruso contra la guerra en el exilio—, Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha declarado:
“La causa penal abierta contra el Comité contra la Guerra es el último intento de las autoridades rusas para atacar a activistas no sólo en Rusia, sino también en el extranjero. Hace que cualquier relación con el Comité desde Rusia sea extremadamente peligrosa, y pone a las personas que mantienen este tipo de contactos —incluidos colegas y familiares— en peligro de sufrir arrestos, registros arbitrarios y largas penas de cárcel.”
“Denominar `terrorismo´ al trabajo de incidencia contra la guerra criminal de Rusia en Ucrania es darle la vuelta a la realidad con una maniobra diseñada únicamente para infundir miedo y suprimir el espacio para la solidaridad entre las personas que están contra la guerra dentro de Rusia y las que han tenido que exiliarse.
Denominar `terrorismo´ al trabajo de incidencia contra la guerra criminal de Rusia en Ucrania es poner la realidad del revés con una maniobra diseñada únicamente para infundir miedo y suprimir el espacio para la solidaridad entre las personas que están contra la guerra dentro de Rusia y las que han tenido que exiliarse.
Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central
“Las autoridades rusas deben retirar de inmediato estos cargos absurdos y dejar de utilizar indebidamente la legislación sobre terrorismo, seguridad del Estado y ‘organizaciones indeseables’ para silenciar la disidencia. La comunidad internacional debe intensificar sus esfuerzos para apoyar y proteger las iniciativas rusas contra la guerra y a los ciudadanos y ciudadanas de Rusia que siguen oponiéndose a ella.”
Información complementaria
El 14 de octubre, el Servicio Federal de Seguridad anunció que había emprendido acciones penales contra destacadas figuras de la oposición en el exilio que incluían miembros del Comité contra la Guerra. Se habían presentado cargos in absentia contra 23 de sus miembros, incluidos los expresos de conciencia Mijail Jodorkovsky, Vladimir Kara-Murza y la expresa de conciencia Anastasia Shevchenko, y también contra el ex primer ministro ruso Mijail Kasyanov y “otras personas no identificadas”, lo que sugiere que la lista de personas acusadas está abierta.
Estas personas están siendo investigadas por intentar “tomar violentamente el poder” (artículo 278 del Código Penal) y “organizar una comunidad terrorista” (artículo 205.4 1 y 2), delitos que pueden conllevar pena de muerte. El Comité contra la Guerra fue creado en 2022 por destacadas figuras rusas que habían emigrado por motivos políticos. El Servicio Federal de Seguridad afirmó que el objetivo del Comité es “cambiar el orden constitucional” de Rusia y “tomar el poder por la fuerza”. Las autoridades la declararon organización “indeseable” en enero de 2024, una medida que la convertía en ilegal y prohibía toda colaboración con ella en el país.
Por su parte, Mijail Jodorkovsky también tiene abierta una causa penal en aplicación del artículo 2025.2.2 por “llamamientos públicos para llevar a cabo actividades terroristas”.


