La decisión del Tribunal Supremo de Arabia Saudí de confirmar la condena de 10 años de cárcel y mil latigazos del bloguero Raif Badawi hace que éste sea un día aciago para la libertad de expresión en el país, ha dicho Amnistía Internacional.
“Es terrible que se haya confirmado esta cruel e injusta condena. Escribir un blog no es delito y Raif Badawi está siendo castigado sólo por atreverse a ejercer su derecho a la libertad de expresión”, ha dicho Philip Luther, director del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.
“Al no anular la condena, las autoridades saudíes han mostrado hoy un cruel desprecio hacia la justicia y hacia las decenas de miles de voces que en todo el mundo piden que Raif Badawi sea puesto en libertad de inmediato y sin condiciones. Ahora que la condena es definitiva y no puede revocarse, el bloguero podría ser flagelado en público ya desde el viernes y cumplirá injustamente el resto de la pena. La decisión del tribunal es una mancha más en el ya sombrío historial de derechos humanos de Arabia Saudí.”
Raif Badawi fue condenado 7 de mayo de 2014 a 10 años de cárcel, mil latigazos y una multa de un millón de riyales por un tribunal penal de Yidda por crear un foro de debate público online. El bloguero es preso de conciencia de Amnistía Internacional, que ha emprendido una campaña mundial en favor de su liberación, con el apoyo de decenas de miles de personas en todo el mundo.
El 9 de enero de 2015, Raif Badawi recibió 50 latigazos en una plaza pública de Yidda tras la oración del viernes, con la consiguiente indignación internacional. Las dos semanas siguientes, la flagelación se canceló por consejo médico y no ha vuelto a ser flagelado, aunque las autoridades no han desvelado el motivo. Tras la decisión de hoy, está en peligro inminente de recibir los 950 latigazos restantes.