En respuesta a una encuesta de una coalición de destacadas ONG, organizaciones deportivas y sindicatos, sólo uno de los cuatro candidatos a presidir la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) ha expuesto un plan para abordar cuestiones relativas a los derechos humanos, los derechos laborales y la corrupción en caso de tener éxito en su intento de el máximo mandatario del órgano rector del fútbol.
La Alianza Deporte y Derechos (Sport and Rights Alliance, SRA) envió el mes pasado a los candidatos –Sepp Blatter, Luís Figo, príncipe Ali bin Al Hussein y Michael van Praag– un cuestionario con preguntas concretas sobre abusos vinculados a la Copa Mundial 2018 en Rusia y la Copa Mundial 2022 en Qatar, así como sobre el proceso de reforma de la FIFA. Las elecciones a presidente de la FIFA se celebrarán el 29 de mayo en Zurich.
Los cuatro candidatos respondieron a la encuesta, en la primera ocasión que se les ha pedido que contesten sobre las crisis de derechos humanos y transparencia que rodean las ediciones de la Copa Mundial y la labor general de la FIFA. Sólo Michael van Praag contrajo un compromiso personal detallado de abordar las cuestiones planteadas por la SRA.
Luís Figo emitió una breve declaración expresando la necesidad de un enfoque de tolerancia cero respecto a los abusos contra los derechos humanos, la corrupción y las cuestiones laborales, pero ofreció pocos detalles acerca de cómo abordaría estos problemas.
A pesar de las numerosas denuncias de corrupción y controversias sobre motivos de preocupación en materia de derechos humanos durante sus 17 años al mando, el presidente de la FIFA en ejercicio, Sepp Blatter, no adquirió compromiso personal alguno de abordar estos asuntos. En su lugar, su oficina emitió una declaración que subrayaba la labor que la FIFA ha realizado para atajar la corrupción, y señalaba una revisión del proceso electoral en relación con los derechos humanos, las normas laborales, la sostenibilidad y las medidas contra la corrupción.
La oficina del actual vicepresidente de la FIFA, príncipe Ali bin Al Hussein, respondió diciendo que estaba demasiado ocupado para responder, y remitió a la Alianza a su manifiesto y anteriores declaraciones.
Mientras tanto, por otro lado, la FIFA dice que está trabajando en nuevos criterios de construcción para la Copa Mundial de la FIFA de 2026, aunque no se dispone públicamente de ningún detalle todavía.
Eduard Nazarski, director de Amnistía internacional Países Bajos, que es miembro de la SRA, ha declarado:
“A pesar de los diversos grados de compromiso con la necesidad de abordar los derechos humanos, las cuestiones laborales y la corrupción que hemos visto en los candidatos, el hecho de que todos hayan respondido muestra que reconocen que ya no es posible que la FIFA ignore el impacto en los derechos humanos de la Copa Mundial y la falta de transparencia en el centro del fútbol asociación mundial.
“Hemos visto una y otra vez el costo humano de grandes eventos deportivos, ya sean abusos contra los derechos de trabajadores migrantes, desalojos forzosos o violencia policial contra manifestantes pacíficos.
“La prueba clave ahora es si el ganador de las elecciones abordará estos asuntos cruciales. Es fácil hablar por hablar y contraer compromisos generales, pero toda afirmación de que respetarán los derechos humanos y la transparencia no tendrá sentido si no se hace también lo que hay que hacer.
“Si los candidatos se toman en serio esta agenda existirá por fin la posibilidad de que la FIFA pueda cambiar para mejor. El próximo presidente debe asegurarse de que el respeto por los derechos humanos y el compromiso de transparencia ocupan un lugar central en su misión.”
Respuestas:
Sepp Blatter
La declaración de la oficina de Sepp Blatter decía que como parte del proceso de reforma que se inició en 2011, la decisión de conceder la organización de la Copa Mundial de la FIFA se tomará ahora por el congreso, mientras que los límites en cuanto a edad y mandato han sido debatidos pero no aprobados por el congreso.
Luís Figo
Luís Figo decía que su manifiesto contiene varias propuestas para “reformar la FIFA, incluidos límites en cuanto a mandatos, directores independientes, comprobaciones de la integridad y transparencia no sólo en relación con la remuneración de los funcionarios sino también sobre otros aspectos de la gobernanza de la FIFA”.
Luís Figo dice:
“La corrupción, las cuestiones laborales y otros derechos humanos son asuntos con los que deberíamos tener tolerancia cero a las infracciones. Los derechos humanos no son negociables y deben respetarse no sólo en el deporte sino en todas las organizaciones y sectores de nuestra sociedad. Pediré informes detallados de los actuales eventos de la FIFA y actuaré en consecuencia. Elaboraremos procesos electorales que también tomen en consideración a las partes interesadas de la sociedad civil.”
Príncipe Ali bin Al Hussein
La oficina del príncipe Ali bin Al Hussein remitió a la SRA a las respuestas ofrecidas recientemente a Associated Press en relación con los derechos laborales en Qatar, como parte de su reciente cuestionario a los candidatos.
Ali bin Al Hussein dijo a AP que el órgano rector del fútbol debe introducir normas de seguridad para impedir “que tengan lugar trágicos incidentes durante la construcción de estadios y asegurar los derechos laborales y unas condiciones de trabajo justas”. También se comprometió a proponer “directrices claras que todos los países anfitriones de eventos de la FIFA deben adoptar para garantizar la seguridad y protección de todos los trabajadores empleados para cumplir los proyectos de fútbol de la FIFA”. Declaró a AP que había indicios de que se estaban haciendo progresos en Qatar en relación con los derechos de los trabajadores.
Michael van Praag
Michael van Praag afirmó que, en caso de ser elegido, sólo cumpliría un mandato, haría pública su remuneración y todos los gastos de la FIFA, publicaría y explicaría las decisiones después de cada reunión del Comité Ejecutivo y haría público el informe Garcia sobre corrupción en el fútbol asociación mundial , que la FIFA se negó a publicar el año pasado.
Sobre los derechos humanos, dijo que las normas electorales de futuras ediciones de la Copa Mundial deberían incluir una sección específica sobre derechos humanos.
Michael van Praag afirma:
“En general debe prestarse más atención a los derechos humanos en los estatutos de la FIFA. Propugno una asociación del fútbol mundial que aplique los más altos criterios éticos y morales. Esto significa que la propia FIFA debe dar un buen ejemplo y asegurarse de que estos criterios desempeñan un papel clave en la concesión de grandes torneos. Debe quedar claro que no se tolerará la violación de derechos humanos, tanto si se trata de derechos laborales como de cualquier otro tipo de violación. Todos los contratos relacionados con la Copa Mundial deben incluir una cláusula que permita a la FIFA romper un acuerdo con un país (o con otra organización) que no aplique los mismos criterios elevados, enviando de este modo un mensaje firme de que no se tolerarán esas cosas.”
Sobre los derechos laborales en Qatar, dijo:
“En cuanto a la situación de Qatar, tengo entendido que se han tomado ciertas medidas para asegurar unas condiciones laborales uniformemente justas. Como candidato, no puedo evaluar plenamente el funcionamiento de estas medidas. Ser presidente de la FIFA abriría puertas para seguir y juzgar muy de cerca lo que ocurre en cada país anfitrión de un gran torneo y actuar en consecuencia. Lo cierto es que la elección de Qatar ha sido una decisión democrática, y por tanto es definitiva. Tenemos que prepararnos para jugar en esta Copa Mundial. Lo mejor que podemos hacer es asegurarnos de que esta Copa Mundial se organiza bien y, junto con el Comité Organizador local, hacemos todo lo posible para asegurarnos de que las condiciones sean las mejores posibles.”
Información complementaria
El cuestionario de la SRA se envió a los cuatro candidatos el 16 de abril de 2015.
Se les preguntó específicamente si en los primeros 100 días de su presidencia abordarían la corrupción, las cuestiones laborales y otros motivos de preocupación en materia de derechos humanos en relación con las ediciones de la Copa Mundial de Rusia 2018 y Qatar 2022.
Se les preguntó también si utilizarían su influencia como presidente para ejercer presión sobre las autoridades qataríes para adecuar las leyes laborales del país a las normas internacionales y reformar el sistema de patrocinio kafala, que ata de hecho a los trabajadores migrantes a su empresa y les impide salir del país sin la autorización expresa de su empleador.
El cuestionario insistía en si continuarían con el tan necesario proceso de reforma de la FIFA, lo que incluye la aplicación de límites temporales, directores independientes, verificaciones de la integridad y transparencia en relación con la remuneración de los funcionarios y las decisiones de la Comisión de Ética.
La FIFA ha sido atacada en los últimos años en relación con abusos contra los derechos humanos vinculados a la Copa Mundial.
El periodo previo a Brasil 2014 se vio empañado por la violencia policial contra manifestantes contrarios a la Copa Mundial y los desalojos forzosos para dejar espacio para infraestructuras para el evento.
El terrible historial de Rusia en relación con los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero (LGBT), la protección del medio ambiente y la libertad de expresión, sacado a la luz durante los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi el año pasado, sigue siendo un grave motivo de preocupación antes de la Copa Mundial 2018.
Mientras tanto, los estadios y las infraestructuras para la celebración de la Copa del Mundo de Qatar 2022 se están construyendo en un contexto en el que los abusos graves contra los derechos de los trabajadores migrantes son habituales y generalizados, incluidas las muertes en el trabajo, el impago de salarios, las condiciones de trabajo duras y peligrosas y las horribles normas de alojamiento.
Además, la concesión de las ediciones de la Copa Mundial de 2018 y 2022 y otras decisiones han suscitado graves denuncias de corrupción y han dañado aún más la reputación de la FIFA.
La SRA hace un llamamiento para quien resulte elegido próximo presidente de la FIFA introduzca con carácter de urgencia medidas que garanticen que la Copa Mundial se organiza siempre de tal manera que se respeten los derechos humanos, el medio ambiente y los requisitos contra la corrupción en todas las etapas del proceso, desde las candidaturas hasta la presentación de informes final, pasando por la fase de desarrollo y realización.
La SRA incluye a Amnistía Internacional, Football Supporters Europe, Human Rights Watch, Confederación Sindical Internacional , Terre des Hommes, Transparencia Internacional Alemania